
En el aeródromo de Cuatro Vientos, cuna de la aviación española, hay un lugar muy cerca de la torre de control que puede engañar al que pretenda juzgarlo solo por la fachada; nos referimos a la “tienda” (al acabar de leer el reportaje entenderán por qué ponemos la palabra tienda entre comillas…) Buckerbook, referente dentro del comercio especializado para todos los que amamos la aviación.
Hablamos con Pilar, co-fundadora y dueña de la tienda, para conocer un poco mejor sus orígenes, presente y planes de futuro.
¿Cómo surge la idea de crear “Buckerbook”?
La idea nace de uno pilotos y mía (Pilar), al darnos cuenta de que no existía ninguna tienda para amantes de la aviación; sí existían establecimientos para abastecerse, pero muy dirigidos a profesionales, mientras que no respondían a las necesidades ni demandas de los amantes de la aviación. También queríamos cubrir un vacío divulgativo, en especial yo, como aficionada, y contribuir a mejorar la cultura aeronáutica en nuestro país.
Entonces, ¿podemos decir que, aún estando en un aeródromo, no es una tienda exclusivamente para pilotos?
¡Desde luego que no! Cualquier aficionado, de cualquier tipo, incluso los aficionados a los simuladores de vuelo, puede encontrar aquí lo que busca; y si no lo tenemos, lo buscamos.
¿Cuál ha sido la principal dificultad con la que os habéis encontrado a la hora de crear, y mantener, Buckerbook?
Cando empezamos, por el año 1995, no existía Google, por lo que nos costó mucho darnos a conocer, encontrar proveedores y contactar con ellos para encontrar material, en especial si se trataba de algo especial… Paradójicamente, hoy es una competencia para nosotros, incluso desde los proveedores.
Todo lo demás, sin embargo, han sido alegrías dentro de un camino trabajoso, es verdad, pero podemos afirmar que no hemos tenido que “luchar contra los elementos”. Y eso que somos pioneros, junto con Cataluña, en este ámbito de mercado; nos diferenciamos, quizá, en haber adaptado un modelo “americano”, del tipo de establecimientos que podemos encontrar por allí.
¿Por qué en Cuatro Vientos?
La verdad es que comenzamos aquí porque se nos brindó la oportunidad de poder contar con un local, pero lo cierto es que ya pensábamos en establecernos aquí por lo que Cuatro Vientos significa: cuna de la aviación española y un lugar que, aún hoy, es un punto especial para todos los que amamos la aviación. En este sentido, enseguida vimos que era el lugar más adecuado para nuestro proyecto.
Después, con los años, nos ha enganchado su historia, incluso emocionalmente, pues todo lo relacionado con la aviación en España se ha fraguado desde Cuatro Vientos; en este sentido, hoy sigue siendo lugar de formación para muchos pilotos que, en el futuro, darán forma a buena parte de nuestra aviación.
¿Qué público tenéis?
Desde aficionados hasta pilotos privados, que vienen para que les suministremos material. También atendemos a diversas escuelas de aviación.
Se habla mucho de la crisis y cómo ha afectado a ciertos ámbitos, especialmente a los que podríamos llamar “aficiones”. ¿Cómo os ha afectado a vosotros?
Es verdad que algo nos afectó, pero nuestro público es muy fiel y no hemos notado especialmente la crisis, en el sentido que no hemos visto peligrar nuestra continuidad.
Es curioso, porque existe la imagen de que todo lo relacionado con la aviación es caro, casi prohibitivo en algunos casos.
Es cierto que nuestros precios son un poco más elevados que en otros sectores, incluso otros establecimientos del mismo ramo, pero tampoco llega a esas cotas que dices. La calidad del producto, la fiabilidad, la seguridad…, todo eso hace que nos veamos obligados a poner unos precios que, en todo caso, son tan ajustados como justos.
Entonces, ¿qué ofrecéis para lograr manteneros como referente y lograr la fidelidad de vuestros clientes?
Ante todo, un asesoramiento que tiene detrás veinte años de experiencia. Esto nos capacita tanto para atender a la persona muy entendida, que viene con una idea muy clara de lo que quiere, con lo que le ahorramos tiempo y esfuerzos, como para atender a aquella persona que viene sin una idea exacta de qué necesita, buscando un producto específico que pueda responder a sus necesidades: nosotros le ayudamos a encontrar justo lo que necesita.
Y esto lo cuidamos tanto con el cliente que viene en persona a la tienda, como con aquellos que compran a través de la página web, que también pueden contactar con nosotros y estaremos encantados de ayudarles.
¿Cuál es vuestro objetivo?
Satisfacer al cliente, de manera que le fidelicemos. Por ejemplo, para un piloto es muy importante estar seguro de que lo que tiene es lo que necesita, y nosotros buscamos darle esa seguridad.
En otras palabras, nunca buscamos vender por vender, ni tampoco “colocar” el producto más caro, sino dar a cada cliente justo lo que necesita.
En estos años, ¿de qué producto o éxito estás más orgullosa?
¡Hay tantas cosas en veinte años…! Si me tuviera que quedar con algo, posiblemente sea con haber logrado la distribución de Bose, que nos llevó mucho tiempo y esfuerzo.
Pero debo decir que mi mayor éxito, de lo que estoy más orgullosa, no es de algo que haya vendido, sino de las historias que se han creado, que he vivido gracias a la tienda: gente que hemos acogido una noche en la tienda porque se han quedado sin volar; o ir a Caracas y que alguien te reconozca porque una vez le ayudaste a lograr algo que necesitaba y te exprese su gratitud…
¿Con qué te quedas de estos veinte años?
Con la gran cantidad de conocimiento humano que he adquirido. El viajar tanto hace que los pilotos tengan una gran apertura de mente, lo que se traduce en consejos que te dan de cara al día a día cuando atendemos al cliente.
También me quedo con la gran interacción que tenemos con los clientes, que en muchos casos han ayudado a impulsar que fuésemos conocidos en otros lugares.
Pero, sin duda, con lo que me quedo es con haberme enamorado de Cuatro Vientos y de la aviación. ¡Ya pueden ofrecerme lo que quieran que de aquí no nos movemos!
En fin, que este local, este negocio, es mucho más que una tienda: ES MI VIDA. (lo dice con un brillo en los ojos muy especial…)
¿Algún sueño por cumplir aún?
Conseguir que haya en este país una cultura aeronáutica como la que hay en otros países, donde además de afición hay conocimientos y pasión por los aviones…, y todo lo que vuela.
Pero, por soñar, mi gran sueño es seguir aquí muchos años.
Hasta aquí la entrevista con Pilar, dueña de Buckebook. Animaros a visitar el local en Cuatro Vientos, o bien su página web, en la que se pueden hacer consultas, comprar y leer su blog.
Y no puedo finalizar sin un pequeño guiño… ¿Cansado de que te regalen corbatas o colonia? Comparte esta entrevista, por aquello de dar ideas…